Macri se preguntó: “Si se quieren llevar el monumento, cuál
será el siguiente”. Desde el kirchnerismo, Cabandié defendió la mudanza y dijo
que la estatua “fue donada al Estado Nacional”.
El traslado del monumento de Cristóbal Colón del parque
ubicado detrás de Casa Rosada por decisión del Gobierno Nacional, por el
momento frenado por la Justicia, no deja de generar cruces entre la Ciudad y la
Nación. El jefe porteño, Mauricio Macri se planteó: “Si se quieren llevar el monumento
a Colón, me pregunto cuál será el siguiente”. Desde el kirchnerismo le respondieron
que “fue donado al Estado Nacional”.
El jefe de Gobierno porteño utilizó la red social Twitter
para dejar sus impresiones sobre este nuevo cortocircuito entre ambas
administraciones. “Si se quieren llevar el monumento a Colón, me pregunto cuál
será el siguiente, ¿el monumento a los españoles?, ¿el Resero de Mataderos? ¿La
Flor?”, señaló. Y añadió: “Hay que ponerle humor a las cosass porque si no lo
que estamos viviendo es demasiado”.
Más temprano, el jefe de Gabinete porteño, Horacio Rodríguez
Larreta, expresó: “Como siempre vamos a esperar un fallo de la Justicia”, y
aseveró que “es clarísimo que es un monumento de la Ciudad”.
Y recurrió a la ironía, para plantear su repudio a las
intenciones del Gobierno Nacional: “Si dejamos que esto pase, mañana nos afanan
el Obelisco”.
Desde el kirchnerismo, el jefe del bloque en la Legislatura,
Juan Cabandié, defendió la mudanza de la estatua a Mar del Plata al explicar
que “fue donada al Estado Nacional” y, por ende, “pertenece a todos los
argentinos”. “El monumento fue cedido a la Nación y lo pidió la comunidad
italiana de Mar del Plata. Que sigan participando”, remató el diputado
capitalino.
Ayer, la Justicia en lo Contencioso Administrativo federal
frenó el traslado del monumento del descubridor de América tras una presentación
de ONGs de defensa del patrimonio y tras forcejeos entre estos activistas,
dirigentes porteños y empleados de Casa Rosada. Los forcejeos se produjeron
cuando, con una grúa, se quiso iniciar el traslado de la estatua.
El monumento, obra del artista italiano Arnaldo Zocchi y de
más de 600 toneladas, está emplazado en la Plaza Colón, que si bien está detrás
de la Casa de Gobierno, pertenece a la Ciudad. La presidenta Cristina Fernández
de Kirchner quiere instalar allí otra, de Juana Azurduy, donada por el gobierno
de Bolivia.
El jueves, en la sesión ordinaria, la Legislatura porteña
aprobó un proyecto de Fernando Sánchez, Maximiliano Ferraro y Rocío Sánchez Andía,
de la Coalición Cívica, que establece que “para sacar o poner un monumento en
el espacio público de la Ciudad es necesaria una ley de la Legislatura que lo
apruebe”.
A más de cinco siglos de desembarcar en el continente
americano, Cristóbal Colón no deja de generar polémica.
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