CFK traslada la Secretaría de Cultura del Palacio Alvear a la Villa 21-24 de Barracas

Lo anunció al inaugurar la Casa de la Cultura Villa 21 Barracas. La actual sede está en Recoleta. Se mostró con los candidatos porteños del FPV Jorge Taiana, Daniel Filmus y Juan Cabandié. Y dijo que se iniciarán obras de agua potable y cloacas.

El edificio de 1.500 m2 tiene dos plantas (Foto: Silvina Frydlewqsky / Secretaría de Cultura de la Nación)

La presidenta Cristina Fernández de Kirchner inauguró ayer en la Villa 21-24 de Barracas, uno de los asentamientos precarios más poblados de la Ciudad, la Casa de la Cultura, donde funcionará la sede de la Secretaría de Cultura de la Nación.

La nueva sede se construyó a raíz del trabajo conjunto entre la Secretaría de Cultura y organizaciones sociales junto con los Ministerios de Trabajo y de Planificación de la Nación.

La Casa de la Cultura Villa 21 Barracas tiene 1.500 metros cuadrados de superficie, y cuenta con cine 3D y un auditorio con capacidad para 300 personas donde se ofrecerán conciertos y espectáculos teatrales, conferencias y mesas de debate.

Además, el edificio de avenida Iriarte al 3500 cuenta con un extenso hall de entrada destinado a exhibir muestras permanentes y temporales. Y hay aulas para dictar talleres de teatro, fotografía y música.

Como parte del patrimonio permanente en exposición hay más de cuarenta obras de artistas argentinos y latinoamericanos contemporáneos, como León Ferrari, Carlos Gorriarena, Daniel Santoro y Marcia Schvartz, entre otros.

La Secretaría de Cultura actualmente funciona en el Palacio Alvear, en pleno corazón de Recoleta“Que nadie se enoje, porque la vieja sede de la Secretaría de Cultura, ubicada en la avenida Alvear (1.690), va a ser refuncionalizada, va a ser un museo, porque en realidad lo importante es integrar, lograr la armonía, que nadie rechace a nadie”, afirmó la jefa de Estado, junto al ministro del área, Jorge Coscia.

Y aprovechó para decir que “hoy la cultura representa el 3,8 por ciento del PBI, más que la minería y que la pesca” para luego añadir que Argentina “es el cuarto exportador mundial de contenidos audiovisuales”.

La mandataria señaló que “es la primera vez que el Estado llega con esta presencia tan activa a un lugar como lo es la villa de Barracas, la villa más importante demográficamente de la querida Ciudad de Buenos Aires”.

Y sostuvo: “Siento que estamos saldando una pequeña parte de la inmensa deuda que hay (…) concibiendo a la cultura no como cosa solamente reservada a aquellos que han tenido la suerte de nacer en un hogar más favorecido”.

Cristina reconoció que la Villa 21, con una población de 60 mil habitantes, la de mayor población de la Ciudad de Buenos Aires, tiene “necesidades muy grandes” y en ese sentido anunció un convenio con AySA para que 12 mil vecinos tengan agua potable y cloacas. Según informa el despacho de prensa de Presidencia, “en su gran mayoría, la comunidad proviene de Paraguay, Bolivia y las provincias argentinas”, “registra los mayores índices de mortandad por actos de violencia” y describió que “sus principales deficiencias son cloacas, iluminación, pavimento y servicio de ambulancia”.

Por su parte, Coscia dijo que “en una tradición cultural que siempre ha jerarquizado las zonas de mayor poder adquisitivo de la Ciudad de Buenos Aires, inaugurar este edificio del área implica una toma de posición clara y contundente por parte de la Presidencia, es un cambio de paradigma cultural”.

Pero aclaró que “lo que se traslada es el secretario de Cultura de la Nación con un equipo, todo lo que es administración continúa funcionando en los edificios habituales. A partir de hoy, ésta es la sede del secretario, el lugar donde más voy a estar”.

La Presidenta estuvo sentada en una larga mesa junto a Coscia y los candidatos porteños del Frente para la Victoria a la Legislatura, el Senado y la Cámara de Diputados, Jorge Taiana, Daniel Filmus y Juan Cabandié, respectivamente.

Si bien no hizo referencia a las elecciones de octubre, tuvo palabras cómplices para el ex canciller, quien dejó su cargo en junio de 2010.

Más temprano afuera, en la calle, sonaron en vivo rock y cumbia y desfilaron las comunidades con sus brillantes trajes.

Ya se puede visitar “Artistas x la 21-Barracas”

Junto a la inauguración oficial de la Casa de la Cultura Villa 21 realizada por la presidenta Cristina Kirchner, ya se puede ver la colección de pinturas, esculturas, serigrafías, fotografías y objetos llamada “Artistas x la 21-Barracas”.

Podán encontrarse obras de Sara Facio, León Ferrari, Carlos Gorriarena, Adriana Vestido, Marcos López, Ariel Mlynarzewicz, Adolfo Nigro, Res, Gabriela Sacco, Daniel Santoro, Mariano Sapia y Marcia Schvarz. También las de Remo Bianchedi, Fermín Eguía, Fernando Fazzolari, Alejandra Fenochio, Marina Olmi, Nora Patrich, Oscar Smoje, Elba Bairon, Fernando Coco Bedoya y una serie diseñada por Liliana Piñeyro, directora de la Casa Nacional del Bicentenario.

La instalación de mamaderas con la fotocopia de la Declaración Universal de Derechos Humanos de León Ferrari, realizada en 2012, convive con la obra hecha con la técnica renacentista de temple a la caseína "Sobre la historia" (1967) de Gorriarena y con la fotografía "Formas de vida, Vicente López" (2009) donde Gabriel Díaz revela la tragedia urbanística moderna.

Una escultura de mármol de carrara de Omar Estela se adelanta a la fotografía “La Boca” (1966) de Facio y los acrílicos sobre tela "Horas de otoño"(2010) se unen en el espacio con la impresión sobre cartón “Fracción de 30.000” de Rosana Fuentes y con el impactante cuadro “El uturunco o tigre gente”, de Carlos Gómez Centurión.

La Argentina desarmada de pulpa de papel y de papel moneda en curso, obra que Martín Kovensky hizo en 2001 se enfrenta al resplandor de la vida que Lestido captó en la imagen “Marta y Naná”, de la emblemática serie “Madres e hijas”. Allí también está “la pasta de un domingo de masas” escenificada con una Eva Perón sonriente y amasando, de la artista Marina Olmi.

Además se puede ver la fotografía de Res “Belgrano y Santucho en el Monumento a la Bandera” (2009) panorámicas donde 200 personas vestidas de negro pusieron el cuerpo para conformar los rostros de Santucho y Belgrano; el óleo “Peluquera paraguaya”, de Schvartz y los dibujos en tinta china de Smoje.

“La idea es mantener la calidad, la propuesta que debería tener este tipo de espacios tiene que ser equivalente a la de uno similar en Barrio Norte, no debe haber diferencia. Existe un tipo de desprecio que infiere que las cosas para una villa podrían tener otro tipo de connotaciones”, contó a la agencia de noticias Télam Daniel Santoro, uno de los convocados, que donó el óleo “Pulqui y Eva” (2010).

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