La presidenta Cristina Fernández de Kirchner será operada a
partir de las 8 de la mañana en la Fundación Favaloro a raíz del hematoma
craneal que padece, luego de que se conociera que sufrió otros malestares físicos.
Las autoridades del centro asistencial informaron que la
decisión de operarla se tomó luego de que la mandataria manifestara sentir el
domingo un “hormigueo en el brazo”, y que se “constató una transitoria y leve
pérdida de la fuerza muscular del mismo miembro superior”.
“Frente a dicho cuadro clínico este equipo indica la
intervención quirúrgica. La misma consiste básicamente en la evacuación quirúrgica
de dicho hematoma”, indicó un comunicado firmado por Facundo Manes, director
del Instituto de Neurociencias de la Fundación Favaloro, y Gerardo Bozovich,
director médico de dicha institución.
La jefa de Estado será intervenida quirúrgicamente por el
jefe de Neurocirugía de la Fundación Favaloro, Cristan Fuster, de 40 años, un médico
de prestigio, especializado en la afección que padece Cristina, y con una
importante formación internacional.
El comunicado de la Fundación se conoció pasado el mediodía
a través del Secretario de Comunicación Pública, Alfredo Scoccimarro, quien lo
llevó a la sala de periodistas de la Casa Rosada.
“La Presidenta fue internada en el hospital de la Fundación
Favaloro para su preparación y estudio cardiovasculares prequirúrgicos”, señaló
el informe oficial.
Según los médicos detallaron en ese comunicado, “la inicial
propuesta de reposo y observación indicada el sábado 5 de octubre pasado debió
ser modificada, debido a que la Presidenta presentó en el día de ayer (por el
domingo) a las 19.30 una sensación de hormigueo en su brazo izquierdo”.
La noticia de la operación de CFK se conoció luego de que
por la mañana surgieran rumores que se generaron tras el nuevo ingreso de la
jefa de Estado a la Fundación Favaloro, institución a la que entró por primera
vez el sábado último con los primeros síntomas del cuadro.
Su hijo, Máximo Kirchner, y su madre, Ofelia Wilhelm, se
hicieron presentes durante la jornada. También fue hasta el centro de salud el
vicepresidente Amado Boudou, entre otros funcionarios.
La mandataria se encuentra en la habitación 601 del sexto
piso, un lugar estratégico en el edificio de la Favaloro, ya que es de difícil acceso.
En la zona del hospital hay una fuerte presencia de Policía Federal y seguridad
privada.
Asimismo, se acercaron al lugar militantes de la agrupación
Tupac Amaru, para brindarle palabras de apoyo en las horas previas a la
intervención.
En paralelo al ingreso de Cristina al centro de salud,
Boudou asumió formalmente al frente del Poder Ejecutivo por 30 días, pero hasta
ese momento no se conocía la noticia de la operación.
Con respecto al rol presidencial, el abogado
constitucionalista Roberto Boico explicó que la mandataria puede tomar licencia
por indicación médica y no necesariamente delegar facultades de su investidura.
“La decisión de delegar facultades es una decisión que debe tomar la primera
mandataria por propia voluntad”, argumentó el letrado y sostuvo que no hay
causales para una “auténtica delegación de facultades”.
El artículo 88 de la Constitución Nacional establece que,
para delegar facultades, la Presidenta debería tomarse licencia y dictar un
decreto en el que delegue las facultades
de su investidura al vicepresidente.
Los líderes de la región expresaron su preocupación y le
enviaron sus buenos deseos a CFK. Lo hicieron el presidente de Ecuador, Rafael
Correa; el de Bolivia, Evo Morales; el de Uruguay, José Mujica; el de Paraguay,
Horacio Cartes; el de Colombia, Juan Manuel Santos; el de Venezuela, Nicolás
Maduro; y la mandataria brasileña, Dilma Rousseff. También el secretario de la
Organización de Estados Americanos (OEA), José Miguel Insulza. La mayoría eligió
la red social Twitter, otros optaron por los mecanismos formales.
También los referentes políticos locales manifestaron sus
mensajes de buenos deseos a Cristina. El jefe de Gobierno porteño, Mauricio
Macri, expresó su “preocupación” por la salud de la Presidenta. “Estamos
preocupados y todos deseamos que la Presidenta se recupere rápidamente”, dijo a
la prensa. Y añadió: “También sentimos un enorme nivel de incertidumbre porque
no se está dando toda la información que se debería” y expresó que “los médicos
deberían dar una conferencia de prensa y a través de los medios hacer saber qué
es lo que sucede”.
El pasado sábado, a Cristina se le practicó una tomografía y
se le diagnosticó una “colección subdural crónica”, una acumulación de sangre
entre dos de las tres membranas que recubren el cerebro, provocada por un
traumatismo de cráneo sufrido el 12 de agosto.
Lo que es una certeza es que la Presidenta se operará, pero
aún se desconoce el tiempo de recuperación que tendrá una vez que salga del quirófano.
Nota con despachos de agencias Télam, Noticias Argentinas,
EFE y AFP.
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