El dueño de un local de venta de comidas fue asesinado de un
balazo en el pecho al resistirse con un palo de escoba un robo de tres
delincuentes armados en su comercio del barrio de Barracas el sábado por la
noche.
El hecho ocurrió alrededor de las 22.20 del sábado en “Rincón
Norteño”, local donde realizan repartos de empanadas tucumanas y otros platos típicos
del norte argentino, situado en avenida Montes de Oca 269, entre Ituzaingó y
Finochietto, en la zona sur de la Ciudad.
Según informaron fuentes policiales, en el interior del
local se encontraban su dueño, identificado como Martín Brullo, de 36 años,
varios empleados y clientes ocasionales, cuando irrumpieron en el lugar tres
delincuentes armados con fines de robo.
De acuerdo a lo relatado por los testigos presenciales, los
asaltantes primero sustrajeron las pertenencias de los clientes y luego le
exigieron a Brullo la entrega de la recaudación. Pero el dueño del local les
dio lo que tenía, pero no era una importante suma de dinero.
Los delincuentes pidieron más, circunstancia en la que
Brullo comenzó a forcejear con uno de ellos al que golpeó con un palo de
escoba, por lo que un segundo asaltante le dio un balazo en el pecho.
Tras el disparo, los ladrones abandonaron el local, se
subieron a un automóvil color negro y huyeron por Montes de Oca, en tanto que
los testigos llamaron al 911.
Personal de la comisaría 16 de la Policía Federal arribó al
comercio asaltado y halló a Brullo tirado en el interior del local con una
herida de bala en el pecho, con orificio de salida en la espalda.
Médicos del SAME llegaron minutos después hasta el lugar en
una ambulancia y constató que el comerciante ya estaba muerto, y que la herida
en el costado izquierdo del tórax le había provocado un sangrado masivo.
En la escena del crimen, los peritos de la Unidad Criminalística
Móvil de la Policía Federal secuestraron un proyectil y una vaina servida
calibre nueve milímetros y el palo de escoba con el que Burllo se resistió al
robo. También levantaron huellas en el interior del local en busca de rastros
de los delincuentes, en tanto que en uno de los bolsillos del pantalón de la víctima
hallaron unos mil quinientos pesos en efectivo, informaron los voceros.
Para la investigación, se buscaron las cámaras de seguridad
instaladas en la calle y en edificios linderos para determinar la secuencia de
los hechos.
En ese sentido, un vecino contó a los investigadores que
cuando se aprestaba a ingresar al local para retirar un pedido vio salir a la
carrera a dos de los delincuentes portando armas de fuego, por lo que decidió
volver a su domicilio.
Una mujer que vive en el barrio contó ayer a un medio
televisivo que ella se acercó al lugar del hecho luego de enterarse de lo
sucedido y contó que se repiten los robos a comercios en la zona pero que “nunca”
había pasado algo así.
La causa fue caratulada como “homicidio en ocasión de tentativa
de robo a mano armada” y quedó a cargo del personal de la Fiscalía Nacional
Criminal de Instrucción 31 porteña.
Nota con despacho de agencia Télam
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