Este año hubo más de 500 actividades en 222 espacios culturales en toda la Ciudad.
Más de 800 mil personas salieron a las calles anoche para
disfrutar de la 12ª edición de La Noche de Museos, una propuesta cultural que
incluyó más de 500 actividades en más de 200 espacios que se prolongaron hasta entrada
la madrugada en la Ciudad.
Este año, el evento coincidió con la importada celebración
de Halloween –que va ganando fanáticos- y algunos aprovecharon la ocasión para
disfrazarse y recorrer para luego festejar.
A la medianoche, los organizadores señalaron que en esta
edición se registró un importante incremento en la asistencia de vecinos y
visitantes que se acercaron a los museos y espacios culturales que abrieron sus
puertas, con entrada gratuita, entre las 20 del sábado y las 3 de la madrugada
del domingo.
De acuerdo a las estimaciones del Ministerio de Cultura
porteño, se superó las 800 mil personas que asistieron el año pasado.
Más de 500 actividades, como muestras, cine, música,
escenarios al aire libre, narraciones y danza, entre un largo etcétera, se ofrecieron
en todos los barrios de la Ciudad.
El ministro de Cultura porteño, Hernán Lombardi, expresó que
“la Ciudad de Buenos Aires una vez más celebra este ya clásico evento cultural
que los porteños esperan todo el año y que se constituye en una auténtica
fiesta colectiva”.
A poco de comenzado el evento, una función al aire libre de “Don
Quijote”, a cargo del Ballet Nacional Sodre, que dirige Julio Boca, convocó a
unas 15 mil personas en la plaza República Oriental del Uruguay, en avenida del
Libertador y Austria.
En los espacios más recorridos se podían observar largas
filas de personas que esperaban para entrar, en especial en el corredor norte
de avenida del Libertador, y la Milla de Museos, que nuclear una gran
diversidad de museos y centros culturales en pocas cuadras.
Este año, La Noche de los Museos tuvo 30 nuevas sedes que
participaron por primera vez, como la Junta de Estudios Históricos y Culturales
de Villa Lugano y Villa Riachuelo y FoLa, Fototeca Latinoamericana, entre
otros, alcanzando así una cifra récord de 222 espacios entre museos -99- y
centros culturales -123- distribuidos en todos los barrios de la Ciudad.
En esta edición, se rindió homenaje a la figura del célebre
cantor Carlos Gardel, con distintas exposiciones sobre la vida y música del “zorzal
porteño” que pudieron apreciarse en diversos museos de la Ciudad, junto con
clases y conciertos de tango. En Balvanera hubo dos exposiciones: en el Museo
Casa Carlos Gardel, de Jean Jaures 735, “La voz en los tiempos de Gardel”,
acerca de los grandes del canto lírico y popular de finales del siglo XIX y las
primeras décadas del XX; y “Orígenes del Tango Canción”, con documentos y
fotografías de los inicios del género bajo la figura pionera de Gardel, en el
Centro Educativo del Tango de Buenos Aires.
Y en el Centro Cultural Polo Bandoneón, que funciona en el
edificio del Puente Alsina, en avenida Sáenz 1480, hubo música en vivo con
Orquesta del Semillero del Polo Bandoneónón y tocaron los Músicos del Polo
Bandoneón.
En el Centro Cultural Recoleta, ubicado en Junín 1930, las
salas estuvieron dedicadas a la séptima edición de FASE, el mayor Encuentro de
Arte, Ciencia y Tecnología con la obra de 200 artistas. La subgerenta operativa
del esapcio, Silvia Sánchez, destacó que “a primera vista la actividad convocó
más gente que otras ediciones, en las que se llegó a 80 mil personas, lo que
seguramente tuvo que ver con que la propuesta ofrecida atrajo a más público joven”.
Por su parte, Omar Smoje, director del Palais de Glace,
situado en Posadas 1795, manifestó su satisfacción por la gran cantidad de público
que se acercó y explicó que el objetivo “fue mostrar en esta ocasión lo que
nunca se vio en Argentina: obras de arte de nuestro país de 1910 a 1940, una
rareza de una sola acuarela de 1879, que es una pequeña joyita”.
Y en el Museo Nacional de Bellas Artes, el público pudo
disfrutar de la exposición “Pérez Celis: testimonio americano” y participar “La
máquina de pensar del Doctor Osman: Ya siento el movimiento”, con el foco
puesto en el mundo del arte óptico y cinético, para chicos, y de una visita
rapeada por la obra de Degas. En tanto que afuera, sobre un escenario para
actividades musicales, Leo García deleitó a los presentes con un recital; también
estuvieron DJ Caravagio y las bandas King Coya, Fauna y El Remolón.
La propuesta del Museo del Títere, en Estados Unidos 802,
fue que los más chicos construyeran personajes. Y en el Museo de Bellas Artes
de la Boca, sobre avenida Pedro de Mendoza 1843, vivir la magia del Desfile de
Barriletes Iluminados.
En el Museo Histórico Nacional, en Defensa 1600, la gran atracción
fue la exhibición del sable corvo de San Martín, así como una versión interactiva
del Libertador de América con la que el público pudo charlar. Según informó
Yoel Bellota, hubo una “mayor circulación de gente que el año pasado, cuando
hubo seis mil visitantes” y estimó 10 mil para este año. Y en el parque,
abierto especialmente para la ocasión, hubo un concierto de música folclórica.
En el Museo de Arte Moderno, ubicado en avenida San Juan
350, se llevó a cabo un ciclo de cine experimental, y los visitantes se
encontraron con músicos que tocaban instrumentos construidos por León Ferrari;
una muestra de Marina de Caro, denominada “Contra la gravedad” y para los más
pequeños, el Espacio Caleidoscopio.
Y en el Museo de Arte Contemporáneo, el público disfrutó de
la muestra Obsesión Geométrica, que reunía trabajos de 1965 a la fecha, con la
particularidad de que se trata de una sola muestra conectada temáticamente y
atravesaba los cuatro pisos.
Nota con despachos de agencias Noticias Argentinas y Télam
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