El Ejecutivo porteño prepara los últimos detalles enviar la iniciativa, en tanto que exhortó a los metrodelegados a que no realicen medidas de fuerza mientras siguen las negociaciones con Metrovías. Pero el diálogo entre las partes está estancado.
El Gobierno porteño prepara los últimos detalles para presentar en la Legislatura el proyecto de ley para oficializar el traspaso del subterráneo al ámbito de la Ciudad de Buenos Aires.
Según información publicada por la agencia Noticias Argentinas, en base a fuentes del macrismo, la presentación de la iniciativa se retrasó ya que se le debió realizar una serie de modificaciones, por lo que ingresaría al Parlamento porteño “no antes del martes”, ya que el lunes es feriado.
El ministro de Hacienda de la Ciudad, Néstor Grindetti, señaló que el Ejecutivo porteño quiere tener “un plan claro y presentado en la sociedad para el subte, con inversiones a mediano y largo plazo que van a estar claras, y en el corto mejorar el servicio para el pasajero”. Y en ese sentido, expresó que “descuenta” tener el apoyo del resto de los bloques en la Legislatura para que la ley sea sancionada, “más allá de cuestiones técnicas que estamos dispuestos a mejorar”.
En declaraciones a Radio 10, dijo: “Acá no hay que perder de vista que hay gente de por medio, hay usuarios que no viajan con el confort y la seguridad con la que tendrían que hacerlo. No hay forma de no ponerse de acuerdo”.
Con respecto a un posible aumento de tarifas, “se necesitan datos” y conocer el “déficit real” de la concesionaria Metrovías. “Lo primero es tratar de ver si podemos mejorar ese déficit, porque si no lo paga siempre el usuario o el contribuyente con aumentos de impuestos. Vamos a analizar bien el déficit y después podría haber un menú de alternativas, que justamente por eso está demorado el proyecto”, indicó.
Mientras, el Gobierno porteño busca evitar un nuevo paro
La Subsecretaría de Trabajo porteña exhortó a los metrodelegados a mantener el diálogo con la empresa Metrovías y no llevar a cabo medidas de fuerza “mientras las partes siguen negociando”. Este pedido tuvo lugar ante la amenaza de un nuevo paro en el servicio de subtes.
La Asociación Gremial de Trabajadores del Subterráneo y el Premetro (AGTSyP) advirtió que de no avanzar en las negociaciones para cerrar las paritarias –que están estancadas hace ocho meses- van a parar. Ayer liberaron los molinetes de 8 a 10 en las estaciones cabeceras de la red, por lo que los pasajeros pudieron viajar gratis.
“Atento al levantamiento de molinetes, la Subsecretaría de Trabajo de la Ciudad de Buenos Aires exhorta a la asociación gremial a mantener el diálogo iniciado hace varios días con la empresa Metrovías y a no tomar medidas de fuerza mientras las partes sigan negociando”, señaló la dependencia porteña a través de un comunicado.
“No descartamos el paro, ojalá no lleguemos a eso. Pero la empresa Metrovías se ha robado millones de pesos. Chantajea y especula”, dijo el Secretario Adjunto de los metrodelegados, Néstor Segovia, con relación a lo que podría ocurrir el próximo martes, que fue lo que derivó en la respuesta de la subsecretaría que comanda Ezequiel Sabor.
Segovia dejó en claro que no le cree a la concesionaria del servicio cuando argumenta que “no tiene plata”, en lo que respecta al cierre de las paritarias, postergadas desde principio de año, y a la mejora de las condiciones de trabajo y de mantenimiento de la red. “Esto no es porque se nos antoja, queremos cerrar las paritarias”, aseveró el delegado de la línea C.
Los metrodelegados reclaman un 28 por ciento de aumento en el salario mínimo, y que se universalice el pago de una suma de alrededor de 2.500 pesos que, aseguran, Metrovías sólo le pagó a 500 trabajadores enrolados en la Unión Tranviarios Automotor (UTA) en compensación por los diez días descontados a raíz del paro de agosto pasado.
En ese sentido, Segovia preguntó: “¿Qué hizo Metrovías con los 128 millones que en agosto, cuando hicimos el paro de diez días, la Justicia le destrabó para saldar nuestra paritaria porque decían que no tenía plata?”.
Por lo pronto, el subsecretario de Trabajo convocó a un nuevo encuentro en la sede de la dependencia capitalina de Bartolomé Mitre 575 el próximo martes a las 10 para intentar encontrar una solución al conflicto.
Ante este panorama, la vicejefa de Gobierno, María Eugenia Vidal, le pidió a Casa Rosada que se “involucre” en la problemática, ya que la Ciudad se hará cargo oficialmente del servicio desde el próximo 1° de enero, si es que la Legislatura aprueba el proyecto enviado por el Ejecutivo porteño.
Nota con despachos de agencias Noticias Argentinas y Télam
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