Ojo con las aguavivas

Se las puede ver en casi toda la Costa Atlántica, aunque en distinta proporción, y más de uno duda de meterse al mar o sale corriendo si posa sus tentáculos sobre la piel. En esta nota, algunas recomendaciones sobre cómo actuar ante una picadura.

Olindias sambaquiensis, la más común de las 120 especies de aguavivas (Foto cortesía http://vidaanimalenclaromeco.blogspot.com)

Se fue enero y comenzó un nuevo recambio turístico: unos que vuelven cabizbajos a sus lugares de origen para retomar el trabajo o preparar compromisos de estudio, otros que esperan ansiosos llegar a ese rincón de la Costa que eligieron para pasar unos días de descanso. Unos las padecieron, otros están a tiempo de estar atentos. Es que más allá de los que se regresan y los que llegan, quedan ellas, las aguavivas, y son un clásico del verano.

Seguro quien lee esta nota la sufrió o conoce alguien que haya sido picado por una aguaviva y haya sentido ese ardor tan molesto. Y no sorprende que aparezcan si hubo viento del norte en la costa, y fueran arrastradas por el mar. A pesar de esto, son cientos de personas las picadas por la especie Olindias sambaquiensis, que mide aproximadamente 15 centímetros de diámetro y se la reconoce por tener algo rojizo en el centro.

Los médicos Juan Moscovich y Pablo Young realizaron un estudio sobre la picadura de esa especie, la más común de las 120 especies que habitan en el mar y que es endémica en las playas comprendidas entre Necochea y Pehuen Có, en el sur de la provincia de Buenos Aires.

Ambos plantean, en el artículo publicado en la revista Medicina, que “en las últimas temporadas, sin embargo, han irrumpido en cantidades cada vez más significativas en playas como las de Mar del Plata, Pinamar o Villa Gesell, y hasta Punta del Este y playas del sur de Brasil”. Pero también señalan que en las playas de Villa Gesell, San Clemente y Mar del Plata también aparecen ejemplares de Liriope tetraphylla, medusas que tienen apenas un centímetro de diámetro y son difíciles de observar porque el 95 por ciento de su organismo es agua.

¿A qué se debe a que se vean cada vez más en las playas del norte de la Costa? Por el calentamiento de las aguas y la sobrepesca.

Young, que forma parte del Servicio de Clínica Médica del Hospital Británico, comenta al diario La Nación en una nota realizada por Fabiola Czubaj, con respecto a esta última especie, que “pica y produce una lesión en la piel, que es lo que molesta, pero también que los casos mortales son muy raros”. Además, expresa que si la playa está minada de medusas las autoridades deberían colocar un banderín de precaución o recomendarle a la gente que no se meta en el agua. Y dice que los que más sufren las picaduras son los chicos.

Con respecto a la gravedad de la picadura, depende del veneno de cada especie. El de la Olindias sambaquiensis es el más peligroso. En ese sentido, Moscovich, que está en el servicio de Otorrinolaringología del Hospital Naval de Buenos Aires, cuenta que “lo que queda pegado en la piel es el tentáculo, que descarga el veneno y convendría guardar para que el médico identifique el tipo de medusa que causó la picadura”.

En el estudio se hace referencia a 49 casos de picaduras en balnearios de Monte Hermoso, y las lesiones más comunes fueron edema, eritema (enrojecimiento e inflamación), dolor, ardor y excitación causada por las neurotoxinas que inyecta el veneno al organismo.

Lo que no debería hacerse en esos casos es colocar agua de la canilla o de mar en la lesión. El agua corriente hace que las vesiculitas del tentáculo se rompan, lo que empeora la lesión, y el agua de mar podría contaminarla aún más”, señala Young.

En las playas donde las aguavivas son endémicas, los médicos recomiendan que haya suero fisiológico para limpiar la herida, hielo seco y algún analgésico antiinflamatorio para la atención inmediata al sufrir una picadura. Como alternativa se puede colocar vinagre común sobre la lesión durante unos minutos, retirar el tentáculo con la yema de los dedos y colocar hielo seco o esos packs que se llevan en las heladeritas.

Fuente:
Diario La Nación, lunes 31 de diciembre de 2012, página 16, sección Sociedad. Nota: “Advierten sobre los riesgos de las aguavivas en la costa”, de Fabiola Czubaj.

No hay comentarios:

Publicar un comentario

Importante

Panorama Ciudad


Importante: Este blog no ofrece espacio para publicidad, no hay ninguna pauta publicitaria, ni vende ningún producto ni servicio. Las noticias en este espacio se difunden de manera gratuita, sin suscripción, por el mero fin de informar.




Recientes

recentposts

Las Más Leídas

randomposts