Luego del crimen, el agresor se atrincheró en su casa algunas horas y tras escaparse por el patio, se entregó en la comisaría 42 acompañado por un abogado. La noche previa al asesinato la víctima y el victimario habían discutido.
Un hombre asesinó a su vecino de cuatro balazos tras
mantener una discusión por una medianera, se atrincheró en casa del barrio de
Mataderos durante varias horas y luego, tras escaparse por el fondo del patio,
se entregó en la comisaría 42 acompañado por un abogado.
El hecho ocurrió ayer en el barrio porteño de Mataderos
cerca de las 11.30 cuando la víctima, Eduardo Nieves, de 51 años, llegaba a su
domicilio de avenida Directorio 7451, y el agresor, José Pérez, de 69 años, lo
estaba esperando armado.
El agresor esperó que el hombre volviera de la panadería y
cuando llegó lo habría insultado y rápidamente le disparó cuatro balazos en el
tórax que le provocaron la muerte. Acto seguido, el asesino corrió para su casa,
a unos metros, en Directorio 7447 y se refugió allí para evitar ser detenido,
pero cuando ya estaba el grupo GEOF de la Policía Federal, se escapó por el
fondo de su casa. Antes de las 14, se entregó en la comisaría 42.
Según trascendió, la discusión entre los vecinos se habría
originado por diferencias en la construcción de una medianera que estaba al
fondo de la casa de ambos y la noche previa al asesinato se habrían enfrentado
a los gritos.
La mujer de la víctima, llamada Blanca, dijo a la prensa que
cuando llegó a la casa, el hombre ya estaba muerto y confirmó la mala relación
que tenían los vecinos por la medianera y que venía “de hace más de un año”.
“Eduardo ya había sido amenazado por el vecino con un arma y
habíamos realizado la denuncia”, contó. Sin embargo, fuentes de la investigación
confirmaron que hasta el momento no aparecieron las denuncias por agresiones y
amenazas de las que habló la mujer.
Por su parte, la hijastra de la víctima comentó: “Yo no
conocía al vecino, si sabía que podía terminar de esta manera y por eso él tenía
planeado mudarse y quería vender la casa porque tenía varios conflictos con el
vecino”. “Mi mamá siempre me decía que el vecino lo había amenazado de muerte y
se ve que aprovechó que estaba solo y lo mató”, añadió.
Los efectivos policiales secuestraron en el domicilio del
agresor un revólver calibre 32, que será peritado para determinar si fue
utilizado para cometer el crimen. Además, analizaban una cámara de seguridad
del Gobierno de la Ciudad ubicada cerca de la escena del crimen, que pudo haber
captado el momento de los disparos.
La causa es investigada por el Juzgado Criminal de
Instrucción 47 a cargo de la jueza Mónica Berdión De Crudo.
Nota con despachos de agencias Noticias Argentinas y Télam
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